Cuando unidades de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) se encontraban verificando y solicitando antecedentes en los establecimientos comerciales del barrio La Ermita, lograron la captura de Maicol Estiven Echeverry Castillo, quien tenía una orden judicial vigente por los delitos de secuestro, porte ilegal de armas y hurto calificado.

La captura del hombre, de 39 años, se realizó en la avenida 7 con calle 30, de ese sector de la Comuna 7, a las 5:30 de la tarde.

Aunque inicialmente se presentó como un simple vendedor de verduras, las autoridades pudieron evidenciar que Echeverry Castillo tendría un amplio prontuario delincuencial, pues habría hecho parte de la banda ‘Carora’.

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Según la investigación, el detenido habría participado en un secuestro en La Florida, zona rural de Tibú, en enero de 2016. Y aunque fue capturado en ese entonces, junto con otros tres presuntos integrantes de la banda, se habría fugado en 2022.

Luego, tras recopilar el material probatorio suficiente, las autoridades lograron que el Juzgado Segundo de Ejecución de Penas y Medidas de Seguridad emitiera la orden judicial en su contra.

Fue así como el pasado sábado, las autoridades hicieron efectiva su captura en el barrio La Ermita, de Cúcuta, y un juez le dictó medida de aseguramiento en centro carcelario para que responda por los delitos en mención.

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Participó en un secuestro

Cinco atracadores de una banda denominada ‘Carora’ que se movilizaban en un taxi, interceptaron en la vereda La Florida, zona rural de Tibú, a dos ocupantes de una camioneta Chevrolet.

Según la información, luego de intimidarlos con armas de fuego, los bajaron, amarraron y mantuvieron sometidos entre la maleza, mientras que uno de ellos huía con el automotor hurtado.

Tras varias horas de retención ilegal, los atracadores dejaron abandonadas a las víctimas en la zona montañosa y escaparon en el taxi, el cual fue interceptado minutos después cuando se dirigían hacia Cúcuta por la vía El Zulia, sector La Alejandra, capturando a los sospechosos.

Al parecer, los delincuentes amarraron al chofer con unas camisas, lo que facilitó que pudiera soltarse, pedir ayuda a otro conductor y desplazarse hacia la subestación de Policía del corregimiento de Astilleros para denunciar lo ocurrido.

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