Tener artritis reumatoide es entender que se trata de una enfermedad autoinmune sistémica, caracterizada porque el sistema de defensa del organismo se confunde, atacando las células sanas, lo cual lleva a que la persona presente dolor e inflamación de diferentes articulaciones .
La médica reumatóloga María Constanza Latorre, asegura que los síntomas más significativos de la AR son dolor e inflamación de las articulaciones y se caracteriza porque lo síntomas se presentan predominantemente en las mañanas, posterior al reposo prolongado, especialmente en manos y pies y tiende a mejorar con la actividad física.
Se trata de una enfermedad que afecta en su mayoría a las mujeres, tanto así que la proporción que se maneja en Colombia es de 5:1.
La reumatóloga afirma que “aunque puede presentarse en cualquier época de la vida, en nuestro país la edad promedio en la que estamos haciendo el diagnóstico es a los 36 años. El diagnóstico en las primeras semanas de la enfermedad y el inicio del tratamiento adecuado, han aumentado las posibilidades del control de la artritis".
La especialista también indica que la esta enfermedad puede presentar además del compromiso articular, manifestaciones a nivel cutáneo, pulmonar, cardiovascular, renal y puede estar asociada a otras enfermedades como la artrosis, osteoporosis y algunas enfermedades cardiovasculares tales como: problemas cardiacos, hipertensión, diabetes, entre otras.
Por eso enfatizó en la importancia del manejo integral con equipos interdisciplinarios, la participación activa del paciente durante el tratamiento y el seguimiento de las recomendaciones médicas para evitar complicaciones articulares o en el organismo.
Dicho tratamiento integral e interdisciplinario incluye medicinas, fisioterapia, ejercicio, nutrición balanceada, grupos de apoyo y en algunos casos cirugía.
La Doctora, hace un llamado importante a los pacientes para que una vez sean diagnosticados y su médico tratante les indique el tratamiento a seguir, lo cumplan al pie de la letra; la especialista enfatiza que el seguimiento de estas indicaciones incide en gran medida en la disminución de síntomas como dolor e inflamación, evitar la progresión de la enfermedad y poder llevar una calidad de vida óptima en la que se facilite la posibilidad de realizar actividades de la vida personal y laboral de la mejor forma.