La tragedia humanitaria que está viviendo la región del Catatumbo, en Norte de Santander, a causa de la ofensiva del ELN contra las disidencias de las Farc, es alarmante. A la fecha hay por lo menos 40 personas muertas, al menos 41.236 personas han sido desplazadas y más de 12.000 se encuentran confinadas. Aunque Colombia ha sido testigo durante décadas de la compleja realidad de ese territorio, esta vez el panorama parece ser más complicado y sobre todo violento.
La nueva oleada que impacta a los 11 municipios que conforman el Catatumbo: Ocaña; Abrego; El Carmen; Convención; Teorama; San Calixto; Hacarí; La Playa; El Tarra; Tibú y Sardinata, inició el pasado 15 de enero. Ese día asesinaron a Miguel Ángel López, el único funerario de Tibú y su familia, incluido su bebé de seis meses. Y aunque se dijo que ese habría sido el detonante de la guerra, el presidente Gustavo Petro reveló las verdaderas intenciones del ELN: Desde hace un mes, ese grupo movió tropas desde el departamento de Arauca, por Venezuela, para orquestar una guerra planeada.
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Todo ello, según pudo conocer Colprensa a través de informes de inteligencia, porque al parecer por orden de Gustavo Aníbal Giraldo, conocido como Pablito, y la cabeza principal del Frente de Guerra Oriental, quieren tomar el control de la coca y las rutas por la que sale la droga con destino a Venezuela para finalmente llegar a Estados Unidos. Eso aprovechando, que el frente 33 de las disidencias estaría conformado en su gran mayoría por menores que han reclutado, lo que les daría una ventaja en terreno.
Y aunque ese sería el objetivo, las causas son mucho más complejas. Andrés Aponte, experto en conflicto y quien ha estudiado desde hace años la forma de operar del ELN, explica que lo primero que hay que entender es que hay una nueva dinámica de la violencia, en la que los grupos armados no están interesados en desafiar al Estado, sino que están mucho más pendientes de sus entornos regionales, es decir de sus negocios y del control territorial que puedan ejercer. Por eso, utilizan pactos para evitar confrontaciones entre ellos.
Y el rompimiento de esos pactos es lo que en realidad habría llevado al ELN a intentar tomar el control a sangre y fuego. “La situación en Catatumbo es igual a la que se ha dado en otras regiones, pero con el agravante humanitario. Y no se había dado porque el conflicto entre el ELN y el EPL en 2018 estaba demasiado fresco y les recordaba los costos que tiene la guerra. Pero también porque había una crisis cocalera que había hecho que el negocio y su control no fuera tan importante. Estaban dedicados al carbón y la extorsión. Entonces, en medio de la reactivación, pudo haber un malentendido que desató todo”, dice.
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Pero también, según Andrés Aponte, el ELN no quiere perder el control del territorio, como le ha pasado en Cauca y Nariño.”No quiere dejar que otros tomen la iniciativa y está tratando de poner la casa en orden. Lo diferente acá es que no lo controla, y teniendo conciencia de la diversidad que existe allí, quiere tratar de homogeneizar todo. Esto sacando a todo aquel que quiera alterar sus intenciones de dominio”.
Otro factor a tener en cuenta es el claro rechazo del ELN a un acuerdo de Paz, como lo explica el exdefensor del Pueblo Carlos Negret. “La primera intención del ELN es no hacer la paz con este Gobierno. Ya lo habían dicho hace unos seis meses que ellos iban a tratar de avanzar lo que más pudieran”.
Las conexiones del Gobierno
de Venezuela con el ELN
Una posible conexión entre el ELN y Venezuela no es un tema nuevo. No solo, operan en la frontera, sino que se ha conocido que tienen campamentos en ese país y viven sin preocuparse por el asedio de las autoridades. Pero además, allí operan Pablito, desde Arauca, en el estado venezolano de Apure, y Eliécer Herlinto Chamorro alias Antonio García, por mencionar algunos cabecillas, desde la capital venezolana.
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“Ese espectáculo que hizo el presidente de Venezuela y Diosdado Cabello estrenando uniformes para ir a la frontera y pasarnos dos aviones para decir que ellos están cuidándola, yo en realidad no me la creo. Hoy ya dijo el Gobierno cubano que ningún miembro del ELN está allá, deben estar en Venezuela, que siempre ha sido su refugio”, dice Carlos Negret.