En el barrio Los Olivos, ayer, quienes conocieron y en algún momento compartieron con Cirilo Mojica Leal, les expresaban el pésame a sus familiares, tras conocer que lo asesinaron la noche anterior.

Luego de escuchar la trágica noticia, entre los habitantes del sector se preguntaban ¿por qué lo asesinaron? si, según ellos, en él no se veía maldad y por el contrario, lo apreciaban, porque en ese punto de Cúcuta estuvo la mayor parte de su vida. “Don Cirilo era una gran persona”, aseguró uno de los vecinos de la víctima.

¿Una equivocación? Es lo que se preguntan quienes lo conocieron, pues todo les indicaría que el ataque armado no iba dirigido contra Cirilo. Al parecer, el pistolero, que se movilizaba en una moto Suzuki GN, buscaba a otra persona.

El homicidio

A las 8:15 de la noche del viernes, cuando Cirilo Mojica estaba debajo de un árbol a tan solo unos metros de su casa, esperando que un niño le trajera una gaseosa que había mandado a comprar en una tienda, un desconocido en una moto se le acercó y le disparó.

Al menos tres balazos recibió la víctima, quien cayó al piso agonizante. Como el hecho se registró muy cerca de su hogar, sus seres queridos salieron angustiados, tras escuchar la detonación de los disparos.

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Luego de ver al hombre gravemente herido en el piso, corrieron para llamar a uno de sus hijos, quien al llegar, su reacción fue auxiliarlo, montándolo en un taxi y llevándolo al Policlínico de Atalaya.

Pese al esfuerzo del personal médico que estaba de turno, el hombre no resistió por la gravedad de sus heridas y murió.

Tras este hecho, los investigadores de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) arribaron al sector para adelantar la inspección técnica.

Dentro de las hipótesis que manejan las autoridades sobre este hecho, estaría que el pistolero iba buscando a otra persona, pero terminó asesinando al equivocado.

Presuntamente, el sicario le seguía el rastro a un hombre que se estaría dedicando al robo de motos, lo que se relacionaría a un posible ajuste de cuentas.

Vivió toda la vida en el sector

Como un hombre trabajador, así lo describieron algunos de sus familiares. Su única rutina era salir muy temprano de su casa rumbo a la lavandería en la que laboraba por el barrio Sevilla.

De acuerdo a su familia, él no tenía problemas y quienes lo conocieron, lo describieron como una persona muy tranquila.

A la víctima también le gustaba el fútbol y su pasatiempo era salir a jugar con los veteranos del barrio. “Don Cirilo era un hombre entusiasta, alegre, por este sector todo el que lo conoció sabe lo excelente persona que fue”, sostuvo un allegado a la familia.

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