Las canciones diáfanas de Héctor Galsa y las historias de frontera de Juan Pablo Cárdenas se unieron para crear ‘Cantos y cuentos urbanos’, una propuesta artística para narrar historias y vivencias de Cúcuta.
Todo comenzó con el fraternal reencuentro de dos compañeros universitarios, que forjaron una amistad en el espacio cultural llamado Viernes de Cuentería y Comedia, quienes después de algunos años de no verse, coincidieron en algún punto de esta capital, y decidieron montar, cada uno desde su experiencia creativa, una obra para abordar el acontecer diario del cucuteño, lo tradicional y divertido que tiene esta ciudad.
“Es el resultado de una conversación de amigos donde cada uno desde su arte, encuentran puntos en común, con canciones que él tenía y cuentos de mi autoría, que quisimos compartir desde un mismo escenario para mostrar cómo suena la ciudad, cómo suena la frontera y cómo se puede contar a Cúcuta”, explicó Cárdenas.
“En un afán por recuperar identidad y territorio y unirlos con los acontecimientos diarios y para eso está la exploración folclórica que toma varios elementos. En mi caso la música que hago, yo digo que es como nueva música nortesantandereana, porque hay canciones que tengo en ritmo de merengue campesino, otras en cumbia, que son elementos folclóricos, pero las anécdotas y las narraciones son temáticas urbanas”, según Héctor Galsa.
La función parte de una conversación de amigos en escena, donde van surgiendo las canciones, van contándose las anécdotas, las vivencias, aquellos amores y desamores, con un poco de picardía, sencillez y sinceridad, propios de la gente de Cúcuta.
Desde allí se va hilando toda una historia, de encuentros y desencuentros, en una ciudad donde muchos están de paso, de los sueños de quienes se van y las luchas de aquellos que se quedan, mensajes que le llegan a la gente por ser algo muy cotidiano, según los creadores.
El primer gran logro de esta unión es el haber podido hacer el montaje de 'Cantos y cuentos urbanos', pese a la pandemia, así como encontrar un espacio para presentar la pieza artística, que en un primer momento es el Café Galería París 1871, en la calle 14 No. 2-09 del barrio La Playa, zona céntrica de Cúcuta, que hace parte de la Fundación Agenda Social para el Cambio.
La expectativa es llevar la obra a otros espacios para darla a conocer y a partir del cuento, que es la historia central, junto a la obra musical, hacer un cortometraje, para llevarlo al medio audiovisual, siendo este el siguiente reto para estos dos artistas cucuteños.
Públicos y rostros diferentes