Con evidentes gestos de cansancio por las complejas jornadas que tuvo que soportar para mantener intactas las ganas de sobrevivir luego de escaparse de sus captores, Juan de Jesús Peinado Mora, pudo sonreír ayer, al bajarse del helicóptero del Ejército en el que fue sacado de las entrañas de la selva del Catatumbo.
Agradecido por la nueva oportunidad de regresar a la libertad, Peinado, quien fungía como presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda San Isidro, en el corregimiento Miraflores de Convención, le envió un mensaje concreto a la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (Eln) que lo tuvo secuestrado desde el 24 de junio.
“Que nos dejen trabajar a los líderes sociales. Nuestra labor es trabajar por nuestro pueblo, por el futuro de nuestros hijos. La solución del Catatumbo no es de bala, sino políticamente, con inversión social”, dijo Peinado.
“Logré safarme de las cadenas y esperé a que llegara la noche para correr y escaparme. Aunque pusieron a 50 guerrilleros a buscarme, pude sobrevivir, mientras me buscaban en un lugar, yo estaba en otro”, recordó.
La extracción
Cuando Juan de Jesús Peinado logró salir del radar del Eln, tuvo que ingeniárselas para comunicarse con el Ejército en la zona rural de Teorama, por lo que consiguió un celular para poder llamar.
“Se comunicó con nosotros y nos empezó a indicar que estaba en ciertas zonas y nos envió fotografías y a través de una estrategia especializada de cartografía, logramos ubicar el punto exacto donde estaba. Fue una operación exquisita, porque todo salió bien”, dijo una fuente militar cercana al caso.
Una vez el Ejército tuvo la ubicación de Peinado, se iniciaron las labores de ingreso a la zona, con las medidas correspondientes de seguridad.
Peinado Mora pasó al menos 17 días internado en las montañas del Catatumbo, sostenido por las enseñanzas de superviviencias, hasta que el Ejército lo sacó y lo llevó en un helicóptero hacia Tibú y posteriormente a Cúcuta.
El general Olveiro Pérez Mahecha, comandante de la Fuerza de Tarea Vulcano del Ejército, aseguró que, el también líder social, Alirio Arenas, cuñado de Peinado, fue asesinado el 2 de octubre de 2018 en Ocaña, quien también fue presidente comunal de la vereda San Isidro.
El oficial aseguró que se mantendrá la unión de esfuerzos entre el Ejército, la Policía, la Fuerza Aérea y la Fiscalía, con el fin de evitar que sigan ocurriendo estos hechos.
La Organización de Naciones Unidas había expresado la preocupación por el secuestro del líder social, que durante los últimos 17 años ha trabajado por las comunidades del Catatumbo.
Juan de Jesús Peinado aseguró que no volverá a Convención, para no correr otro riesgo.
“Debo dejar mi tierra y buscar hacer mi vida en otro lado, porque no quiero correr más riesgos”, dijo.